Alimentación: El peso corporal no lo es todo

Lo más común es que nos comencemos a preocupar de nuestra alimentación recién cuando los problemas de peso u otros problemas de salud relacionados son evidentes, y qué decir de la nutrición... de eso poco o nada conocemos.

Y cuando comenzamos con problemas, las opciones casi nunca pasan por educarnos y cambiar nuestro estilo de vida, generalmente optamos por dietas restrictivas o dejar de comer, operarnos, ejercicio en exceso sin que nuestro cuerpo esté preparado, alguna pastilla u otro método rápido, enfocados siempre en "BAJAR DE PESO".

¿Por qué la medición del peso no es lo más importante?

Sucede que el peso corporal está compuesto de 4 componentes: Músculo, Grasa, Huesos y Agua.

No es lo mismo bajar de peso bajando la grasa, que bajar de peso bajando la masa muscular. El primer caso es lo óptimo, el segundo caso es muy peligroso y nocivo para nuestra salud.

Por esto, es importante que al controlar el peso, nos enfoquemos en aumentar la masa muscular (el músculo se come la grasa y ocupa menos volumen) y el porcentaje de agua, mantener la masa ósea y bajar el porcentaje de grasa corporal (sobre todo de la grasa visceral, que es la más perjudicial porque es la que se adhiere a los órganos vitales).

¿Cómo logramos un control adecuado de composición corporal?

1. Primero, asegurando diariamente la ingesta de todos los macro y micro nutrientes que nuestras células necesitan para alimentarse (nutrición celular):

• Proteínas (de preferencia la de soya que contiene todos los aminoácidos esenciales y es más sana)
• Hidratos de carbono o azúcares complejas
• Grasas saludables
• Agua (35 ml por cada kilo de nuestro peso total)
• Fibra, fitonutrientes, vitaminas
• Minerales y agua (sin endulzantes)

2. Comenzar a educarnos en nutrición y modificar nuestra alimentación HOY (no esperemos a sufrir de sobrepeso u otra enfermedad relacionada).

3. Cambiar poco a poco nuestro estilo de vida a uno más saludable, y hacerlo en familia. Nuestros niños deben aprender a comer correctamente y para eso es fundamental que nos vean hacerlo a nosotros.

4. Dejar el sedentarismo, buscando un deporte que nos guste y comenzar poco a poco, así como hidratarnos de forma adecuada antes, durante y después de la actividad física.

5. Controlar la composición corporal, más allá del peso.

Y tú, ¿cuándo vas a comenzar a mejorar tu composición corporal?